Se trata de un órgano de 192 tubos de aceros inoxidable soldados entre sí con una altura de 5.07 metros. El lado de la base, que puede ser un paralepípedo o un cilindro de mármol u hormigón, tiene1.88 metros. Estará instalado en el centro del Parque de la Constitución. El consistorio bastetano se encargará del arreglo de la zona, para lo que tendrá que quitar parte de la fuente, para la instalación del monumento.
La decisión de escoger esta propuesta fue por unanimidad de la mesa de contratación municipal que estuvo integrada por concejales del equipo de gobierno socialista, del PP y del PA y cuatro técnicos del consistorio bastetano.
Este proyecto fue aprobado por unanimidad en sesión plenaria el pasado año tras acontecerse los atentados de Madrid del 11 de marzo y, aunque la propuesta estaba en un principio enfocada a éstos, se decidió posteriormente que el monumento se levantase en honor a todas las víctimas del terrorismo.
Quedó recogido en el presupuesto con un coste de 18.000 euros y en el concurso se indicaba que se tenía que presentar la idea y la ejecución de la misma. Al pie del monumento aparecerá la leyenda: “A las víctimas del terrorismo. La ciudad de Baza”.
Está previsto que en el período de un mes esté en Baza.
El autor de la obra la describe con las siguientes palabras, “Un órgano de 192 tubos se eleva entonando el Réquiem de nuestro pueblo; intenso, profundo, grave, silencioso por momentos. Un canto eterno, siempre.”    
|